viernes, agosto 18, 2006

¿Al fin qué?

No termino de entender la farragosa explicación de un proyecto de ley que busca obligar a las personas infieles a aportar en el servicio de salud de sus amantes y participarles de su pensión.
Según el ponente es para liberar un montón de cupos del régimen subsidiado. Luego aclara que no se trata de promover la infidelidad, pues los aportes harán más difícil ocultar la felonía. O sea que no serán tantos los cupos que se liberen. Más bien se corre el riesgo de que, ante los costos adicionales del adulterio, se den adioses en cantidad suficiente para hacer colapsar el sistema de salud en general.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Entre foclclorico y serio este tema. No me queda claro si con la legislacion vigente que fue la esposa durante 20 anhos puede perder derechos de jubilacion y bienes si hay rival.

Melian dijo...

Este tipo de cosas solo pasan en Colombia. Lo que me causa más gracia (o rabia?) es que el argumento sea el "aliviar el sistema de salud". El Congreso debería dejar de usar pañitos de agua tibia para intentar paliar evidentes problemas sociales y destinar todos estos recursos ($,tiempo y neuronas) en soluciones de fondo.